Obesidad y dolor crónico, un círculo vicioso (Dra. Laura Isabel Arranz)

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Resumen de la conferencia en el congreso SIMPAR, Roma, 2016.
Dra. Laura Arranz, Universidad de Barcelona.

La obesidad tiene un impacto negativo en la salud en general, en la funcionalidad y en la calidad de vida, sin embargo, estos efectos son aún mayores en pacientes que también padecen enfermedades que cursan con dolor crónico. Basado en el conocimiento actual y en las últimas publicaciones, es hoy evidente que hay una relación muy compleja entre la obesidad y el dolor crónico que va mucho más allá de lo que se podía haber pensado.

Hay dos mensajes publicados recientemente que son muy significativos a este respecto a la vez que impactantes:
  1. La obesidad es ahora un problema mayor que el hambre en el mundo. La prevalencia del bajo peso está disminuyendo y es menor a la prevalencia de la obesidad que además está creciendo cada año más. En 2014 el porcentaje de mujeres y hombres obesos en al mundo era de un 14,9% y un 10,8% respectivamente, y si sigue la tendencia actual se prevé que en 2025 la obesidad global llegue a más de un 21% en las mujeres y a un 18% en los hombres (Non-communicable Disease Risk Factor Collaboration. Trends in adult body-mass index in 200 countries from 1975 to 2014: a pooled analysis of 1698 population-based measurement studies with 19·2 million participants. Lancet 2016; 387: 1377–96).
  2. Exite una evidencia creciente de que la relación entre la obesidad y el dolor crónico no es casualidad. Actualmente sabemos que la coexistencia de ambos no es una coincidencia, que no son factores independientes y que, además, se afectan negativamente uno al otro [Editorial by Narouze & Souzdalnitski tittled Obesity and chronic pain: opportunities for better patient care published in Pain Manag. (2015) 5(4), 217–219].
La obesidad es el resultado del aumento de peso debido a un aumento anormal de los depósitos de grasa en el organismo. Puede valorarse por diversos parámetros, uno es el índice de masa corporal, o IMC, igual o superior a 30, pero también con otros como el perímetro de cintura, el índice cintura/cadera o el índice cintura/altura. La principal causa es una elevada ingesta de calorías (sobre todo en forma de grasas o de azúcares) y una falta de actividad física o un estilo de vida sedentario […] Seguit leyendo…